domingo, 11 de octubre de 2009

Oh vida

Oh vida, será que puedo entrar en sus días?
Rebozar mi rostro de alegría,
conciliar la risa perpetua y dormir tranquilo

Quiero el veredicto unánime de los sueños,
que nos unen y desbordan sus delicados besos,
que iluminan su cuerpo de océanos

Oh vida, será que entre tanto sonido,
caerá la noche callada y desconocida,
a unirme con su infinito cabello

Quiero de una vez la verdad prevista,
bañada de agua fresca de su boca,
para entumecerme y quedarme con ella

Oh vida, será que en la mañana nueva,
sus manos consentirán mi empeño,
para hacer de nuestro amor futuro

Quiero los años postrados a su favor,
para entender el porqué de sus ademanes,
para arrebatarle la muerte de una vez por todas

Oh vida, tan simple y fatal,
inevitable como el flujo de los ríos,
que no perdona un paso en falso al final

Quiero llegar profundo hasta su alma,
donde saltan contentas las inquietudes,
donde finalmente descansamos los dos...

domingo, 27 de septiembre de 2009

No te invito a vivir

No quemes tus pies en el suelo del mercado,
no regales tu sonrisa al abatido transeúnte,
no te molestes en abrazar la paz de los portales,
no vivas del creciente verde infinito,
ni rompas los mandamientos de la ambición,
ni le entregues compasión a la miseria...

No te desenvuelvas del drama de la seda,
no confíes en la mano que te ampara,
no defiendas la libertad a toda costa,
no te ilusiones con los sueños,
ni te duermas con esperanza,
ni cuentes conmigo...

No esperes mucho tiempo,
no lo inviertas en cálidas tertulias,
no te expongas al vendaval de la alegría,
no remiendes los zapatos,
ni grites que eres libre,
ni me mires a los ojos...

No tengas paciencia,
no construyas el futuro,
no te conformes con el sol,
never change,
ni te acerques a los muelles,
ni compartas tu mirada...

No estés nunca sin compañía,
no tengas amigos verdaderos,
no temas del hambre que es ajena,
no pienses en la amargura de los niños,
ni cuestiones las leyes,
ni ames a tu patria...

No descuides el resplandor de tu cabello,
no mientas sin adornar la mentira,
no me quieras sin compromiso,
no te muevas si hay inercia,
ni regreses a tu hogar,
ni mires la luna...

No cultives los sueños,
no te rompas las manos por el pan de tu hermano,
no llores fácilmente ni rías a carcajadas,
no toques la puerta del vecino,
ni bebas licores baratos,
ni aceptes por regalo una sonrisa...

No toques nada,
no me acaricies el corazón,
no pintes paisajes que no precisan,
no te ensucies con el barro del camino,
ni pidas perdón nunca, ni agradezcas nunca,
ni respires con la humanidad...

sábado, 8 de agosto de 2009

Amor dos puntos

Me gusta el amor sincero,
que sea tierra, mar y cielo,
y que siempre regrese
aunque nunca se marche...

Me deleita el amor indefinible,
del que hablan siempre,
al que describen siempre,
como frágil y explicable...

El amor que me desvela es entero,
no depende de promesas ni cortas miradas,
es implacable y maduro como un fruto,
que en infinita travesía vuelve a ser semilla...

Ese amor no es lo que me dices,
lo que haces para mantenerme alerta,
es un relámpago de específicos detalles
que definen lo innegable y atraviesan la tormenta...

Ese amor trasciende los días,
la ausencia, la locura y la rutina,
con mucho talento crece y se esconde,
y aparece en nuestras penas y alegrías...

Amor de escrúpulos y paz,
conjunto de lo tuyo con lo mío,
amor lento, sencillo y audaz,
como el símil del calor y el frío...

martes, 4 de agosto de 2009

Batalla

A lo lejos suena la trompeta de tu llegada,
que se combina con el galope de la jornada,
y anuncian la miel, la paz y la guerra,
batalla entre lágrimas, besos y frases;
he ahí la lucha de mis manos,
por devolverte lo que pierdes,
por robar lo que te agobia,
para que sueñes, confíes y me quieras;
gano siempre en el campo de batalla,
por el simple hecho de luchar contigo,
por darte y quitarte costumbres y viceversa,
conocer el perdón y callar escondidos...

Los cañones de tus palabras quedaron en la arena,
la artillería del corazón en tu boca y mi frente,
el humo y la sangre en las banderas y en todos los rincones,
donde hubo calor de tu cuerpo, hubieron buques y promesas;
al final me encuentro con una tregua,
un tratado de amistad y amor perpetuo,
un acuerdo para llorar y reír, para hacerlo juntos,
para cuando amanezca cada día no tener secretos pendientes;
he ahí el coraje de mis manos,
que prefieren intercambiar amarguras contigo,
a dejarte soledades ambiguas y aburridas,
he ahí mi cuerpo que elige morir en la batalla...

lunes, 27 de abril de 2009

Imaginé el mundo sin habitantes

Imaginé el mundo sin habitantes,
la catedral de San Marcos en lo profundo del mar,
las calles de vuelta al polvo cegador,
el musgo devastando las estatuas y los muros...

Ya no quedaban ojos furtivos viendo el ocaso,
la mañana ni los animales vagando sin enemigo,
sin fronteras, escondites ni miedo,
no habían ojos caprichosos, malintencionados...

Del amor de los parques y las ciudades galardonadas
con tener que amparar besos de los mejores amantes,
quedó el viejo rincón desterrado del corazón,
destruidos el metal y la madera por el aire y la humedad...

No había industria ni guerra, ni círculos viciosos,
no estaba el ser supremo que descubrió planetas,
habló idiomas, descifró enigmas y curó enfermedades,
pero no borró el hambre ni la miseria, ni la avaricia...

Los inviernos y veranos coincidían,
estaba enojada la Tierra, retumbaban los ríos,
desesperados expulsando el veneno que dejamos,
que ocultamos tan bien de nosotros mismos...

Ahí seguramente no vivieron habitantes,
vivieron seres indomables, sórdidos y mezquinos,
que en lugar de unificar la Tierra con ilusión y aplomo,
se dieron a la tarea de hacerse llamar habitantes y no habitar nada...

Humanidad, civilización, progreso y otras cosas,
se atribuyen a la sombra que habíamos sido, a la omisión y negligencia,
de saber lo que hacíamos, de no cuestionar la conciencia,
de consumir y anhelar como el agujero negro de Casiopea...

Creo expresar mi dolor antes de tiempo,
no quiero imaginar más catástrofes,
pero me quedo con la tristeza de no estar contigo,
en este mundo sin habitantes...

martes, 24 de marzo de 2009

Una mujer desnuda y en lo oscuro (Mario Benedetti)

"Una mujer desnuda y en lo oscuro

tiene una claridad que nos alumbra

de modo que si ocurre un desconsuelo

un apagón o una noche sin luna

es conveniente y hasta imprescindible

tener a mano una mujer desnuda…


Una mujer desnuda y en lo oscuro

genera un resplandor que da confianza

entonces dominguea el almanaque

vibran en su rincón las telarañas

y los ojos felices y felinos

miran y de mirar nunca se cansan…


Una mujer desnuda y en lo oscuro

es una vocación para las manos

para los labios es casi un destino

y para el corazón un despilfarro

una mujer desnuda es un enigma

y siempre es una fiesta descifrarlo…


Una mujer desnuda y en lo oscuro

genera una luz propia y nos enciende

el cielo raso se convierte en cielo

y es una gloria no ser inocente

una mujer querida o vislumbrada

desbarata por una vez la muerte…"


Mario Benedetti.

miércoles, 25 de febrero de 2009

No soy sin un motivo

No soy sin lo imposible, sin lágrimas de alegría, sin la ruta de la vida por las venas, no soy sin la victoria de los buenos, sin los sueños de la gente... No soy sin la música, sin las óperas de Puccini, la guitarra de Segovia y Petrucci, no soy sin la Sonora Santanera y el tambor africano, sin la novena sinfonía de Beethoven, sin la verdad de Serrat y... No soy sin el deporte, sin Pelé, Zidane, Platini y Beckenbauer, sin Amstrong, Woods, Rocky Marciano y Schumacher, no soy sin el derrape de Loeb y el golpe de Federer, Evert y Borg, sin los oros de Paavo Nurmi y las brazadas de Phelps y Spitz, no soy sin el fuego olímpico... No soy sin la pintura, sin la fantasía de Hicks y Rousseau, sin el movimiento natural de Rembrandt, sin el legado de Felo García y Amighetti, sin La nave de los locos y La Gioconda, no soy sin óleos y acuarelas... No soy sin héroes, sin la nobleza de William Wallace y Juana de Arco, sin la valentía de Galvarino, Luther King y Gandhi, no soy sin Voltaire, Montesquieu y Jesús de Nazaret... No soy sin un poema, sin los caminos de Antonio Machado, sin Walt Whitman, Shakespeare y Rubén Darío, no soy sin la tinta y el corazón de Neruda y Benedetti, sin García Lorca y Jorge Debravo... No soy sin un paisaje, sin los ríos y cañones de la Sierra Madre, sin el Nilo y el Kinzig de la Selva Negra, no soy sin el ocaso de mi tierra, sin el valle de Katmandú, no soy sin el mar azul... No soy sin un motivo, sin que la vida rebusque en mi corazón, sin que el tiempo sea irreversible, no soy sin sueños y sin agua, sin paz y la dulzura de los días, no soy sin ti...

jueves, 12 de febrero de 2009

Tan solo un segundo

En vísperas de primavera cuento contigo,
en cualquier lugar, época y segundo,
tendrías que saber que anduve en sueños,
en fantásticos recorridos y siempre conté contigo...

En los Alpes nevó y se congeló mi imagen,
tuve frío pero mi risa quedó perpetua por ti;
en la Amazonía llovió a cántaros y me mojé,
se borraron mis poemas pero reí por ti...

En el Atacama se quemaron mis pies por el sol,
después de unas quejas ofrecí carcajadas a las dunas;
en Kuala Lumpur subí a las Petronas y morí de vértigo,
pero volví a nacer en risas porque conté contigo...

En Normandía me hirieron y me curé contigo,
en la Guerra Santa clavaron espadas en mi pecho,
pero me quedaron fuerzas para reir contigo,
luché en muchas batallas, caí del caballo y siempre conté contigo...

Anduve en tierras prohibidas, de caníbales y fieras,
sufrí heridas causadas por la soledad,
conocí a David Livingstone en la sabana africana,
y me dormí en los pastizales soñando contigo...

Edad media, oscurantismo, siempre estuviste tú,
entre batallas con Juana de Arco tuvimos hambre,
hubo hombres sin mujer, hijos y esperanza,
luchamos por la libertad y siempre conté contigo....

Al llegar Colón a isla Uvita ví penurias,
soldados ultrajando aborígenes dueños del suelo,
robando oro, con pólvora y patrañas,
cortaron mis manos pero siempre conté contigo...

En las guerras navales napoleónicas naufragué,
luego de balas de cañón y amigos muertos,
marineros con familia, sólidos y valientes,
que quedaron tendidos, yo conté contigo...

Instalaron misiles nucleares en Cuba,
rusos, soviéticos labrando futuro,
guerra fría con vasta destrucción de sueños,
un desperdicio de alegría y yo conté contigo...

Observé de lejos el último golpe al muro de Berlín,
la unión de familias, novios y amantes,
el fin de la tiranía al oeste, por todas partes,
y estuve en el parque celebrando y canté contigo...

En el 86 ví la mano de Dios, un gol de esperanza,
en el Azteca dejé los sueños regados por montón,
y sentí siempre en cada celebración,
el protagonismo de tu dulzura en cada historia y rincón...

Incluso llegué a conocer a Julio César,
conocí el Coliseo romano repleto de gente,
y luego de gritar ¡Ave, Caesar, morituri te salutam!
luché contra Cornelius Scipion el "Africanus" y conté contigo...

En ese Coliseo estuve frente a un león,
el cual no me atacó, me miró a los ojos,
y supe por repentina calma que eras tú,
que siempre me acompañabas con el corazón...

Y supe de inmediato que también eras la primavera,
que eras la nieve de los Alpes y la lluvia de la Amazonía;
eras la sombra y las dunas del Atacama y el viento en Kuala Lumpur,
los barcos y aliados en Normandía, mi caballo en la Guerra Santa;
me dí cuenta que fuiste la soledad en África, las historias de Livingstone,
que eras Juana de Arco y la libertad de mis hermanos,
y en eso de 1502 supe que eras la belleza de la costa americana,
las ansias españolas, el miedo aborigen, la nueva esperanza;
fuiste siempre los grandes galeones guerreros franceses e ingleses,
eras mi flote al quedar naúfrago y solo, la sal del mar en mis labios,
fuiste el discurso de grandes políticos, el miedo del mundo,
la guerra fría y la alegría de no lanzar misiles,
fuiste la primera grieta del muro de Berlín, la sonrisa del preso,
también eras el beso de los amantes nuevamente unidos, eras la libertad;
eras los gritos de la gente en el Azteca, la mano de Dios,
la fiesta en Buenos Aires, las lágrimas en Londres...
Siempre estuviste a mi lado, porque conté contigo,
me regalaste la vida en Roma, en todo el mundo,
anduve en muchos lugares, épocas y segundos,
pero ahora que estoy presente en esta época con vos,
no quiero viajar más entre año y año,
sin que estés presente en cuerpo y alma,
para regalarme la historia más increíble de las historias,
quiero que tengas de una vez por siempre mi corazón,
en vísperas de primavera que me regales el tiempo,
y si fuera el caso que no tuvieses tanto,
regálame tan solo un segundo...

domingo, 1 de febrero de 2009

Poema de febrero

Eres mi memoria y simplemente eso,
la amistad de tus manos entre vientos de espera,
cual si no pasara el año arrastrando los meses,
como inicio en el fin, como olores que recuerdo;
eres mi memoria y simplemente eso,
fotografías de rincones que imagino a cada rato,
mágicos, nostálgicos y llenos de tu abrazo,
iluminados y oscuros, de luz tenue;
hay un San Valentín para ti en febrero,
prefiero que tengas uno todos los meses,
y en la rutina que no es comercial,
te regalo el corazón en una caja de cristal...
Eres mi memoria y simplemente eso,
el tiempo que me regala una derrota,
el paso inevitable de los años,
los momentos que me endulzan la vida;
eres mi memoria y simplemente eso,
mi febrero y todos los meses,
la alegría de tener futuro,
una amiga al principio del arco iris;
hay un poema para ti en febrero,
prefiero que tengas uno todos los meses,
y en pergaminos de menta y café,
regalarte el corazón y simplemente eso...