Abriendo lentamente tu vestido,
me doy cuenta que estás hecha de paz,
algo suave, algo brutal,
algo humana y algo celestial
Caí tantas veces sereno,
absolutamente lleno,
destruyendo el oscuro estruendo,
de mis lágrimas quebrando el suelo
Exploré tus delicados secretos,
anoté en mi bitácora tu aurora,
galáctica inmensidad inquebrantable,
sin muerte, ni adiós, ni hasta luego
En tu poema quiero explicar,
que hay tantas maneras de mencionarte,
tan pocas formas de olvidarte,
y una sola para amarte
Porque este amor es claustrofóbico
y pertenece afuera en las cosas,
explotando a diario y pintando los meses,
siempre sobra para compartir mañana
Siempre seré tu cantor furioso,
cegado, iluminado, oculto en la noche,
seré tu constructor de sueños,
tu guerrero en la batalla...
Abriendo lentamente tu alma,
me doy cuenta que estás hecha de paz,
algo suave, algo brutal,
algo humana y algo celestial...